Pacoki y Fer de la Sierra.
Este sábado hemos subido al techo de Córdoba, nuestra Maroma, nuestro Mulhacén. Si lo comparamos con otros picos puede parecer irrisorio, pero sus 700 metros de altura es lo más alto que tenemos a mano desde la ciudad. También es cierto que partimos de unos cien metros, luego, el desnivel es de 600 m.Siguiendo el GR 40, trayecto que no había hecho anteriormente, cruzamos el arroyo pedroches por el puente de hierro, coincidiendo con la vía del tren fuera de servicio desde hace años. Pasamos por debajo de la carretera que sube a Cerro Muriano hacia el Santuario de la Virgen de Linares ( fundado en 1236 por Fernando III junto a una atalaya musulmana, torres estratégicamente situadas para comunicarse mediante señales con humo blanco o negro). De hecho "Linares" puede derivar de al-narun, "donde se hace fuego".
Sierra Morena (Mons Marianus) y Cerro Muriano deben su nombre al pretor romano Sextus Marius. Llega de Roma en 114 a C. y se convirte en el dueño de todas las minas de Sierra Morena y uno de los hombres más ricos de Hispania.
Otra pincelada histórica. Esta ruta es parte de la calzada que unía Córdoba, capital de la provincia Bética, con Mérida, capital de la Luisiana. Posteriormente, en el siglo XIII, forma parte del Camino Mozárabe o Vía de la Plata, vía que transitaban los peregrinos hacia Santiago de Compostela, a medida que avanzaba la Reconquista. Más recientemente, forma parte de la Cañada Real Soriana (de Soria a Sevilla), como vía pecuaria.
Seguimos corriendo.
Subimos por la Loma de los Escalones, Balazona, Villa Enriqueta y finalmente Torreárboles.
Las vistas estupendas, el tiempo empieza a amenazar lluvia, y ya llevamos unos 15 km de los cuales unos 10 u 11 de subida.
Aprovechamos para tomar una barrita, menbrillo y agua. Empieza a llover fino, unas fotos y para abajo. Pero la vuelta la hacemos hacia el oeste siguiendo el Gr 48 que va hacia el parque periurbano de los Villares.
Los tres mosqueteros.
Anocheciendo en los Villares.
Entramos por el barrio del Naranjo cerca de las nueve de la noche. Paqui ( la mujer de Paco) y los peques nos esperan en un kiosco de caracoles ( bares callejeros temporales típicos en Córdoba durante la época de éstos bichitos babosos, sí porque aquí nos los comemos).
Entre la lluvia que nos ha caído encima y la que hemos robado a los árboles y arbustos en las zonas más espesas, venimos chorreando. Nos tomamos un par de cervezas ( sobre todo para reponer líquidos) y con el vientecito que hacía me quedé como un pajarito.
Han caido 32 km con casi 1000 m acumulados positivos en 3 horas 35 minutos.
Llego a casa, ducha larga calentita y llamo a mi cuñado para organizar algo el domingo.
Con mi amigo Fernando, Córdoba al fondo.
Por la mañana, a las 10, nos vamos con las bicis llaneando hacia el canal dirección Almodovar. A unos 17 km vemos una acumulación de coches de esparragueros ( gente buscando espárragos silvestres, que despiertan una gran afición en la zona) y tras hablar con uno de ellos, decidimos inspeccionar el carril que sube hacia la derecha. Hay un cortijo pegado a una cantera posiblemente de origen romana.Después de una larga subida decido dar la vuelta porque desconozco la salida y hoy estoy haciendo un rodaje suave.
Preguntando a un pastor me comenta que el camino sigue hasta Villalobos, enlazando con el Gr 40 que cruza desde Despeñaperros hasta Portugal ( un buen reto).
A unos 7 u 8 km de casa también nos llueve.
Hoy han sido 40 km pero en bici, la mayoría llaneando.
Ya van dos semanas seguidas de kilometraje alto y la semana que viene hay que bajar el listón para asimilar el trabajo y no pasarse de revoluciones.
Saludos traileros. Jes.
Que blog mas guapo tienes , te pongo un 10 . Un abrazo , ah! y tu si que eres un makina .
ResponderEliminarYa veo que me estáis acorralando. Y yo que lo tenía en secreto.
ResponderEliminarGracias amigo.
Saludos traileros. Jes.